Forsberg y Kulusevski salvan el liderato de Suecia


El doblete de Emil Forsberg parecía dar una ventaja definitiva a una Suecia práctica, sólida y eficaz. Los cambios de Paulo Sousa mejoraron a Polonia tras el descanso, que supo arropar a Lewandowski para empatar. Sin embargo, cuando parecía acercarse a la remontada, el combinado sueco encontró huecos para contragolpear con Kulusevski, autor de dos asistencias. En el añadido, Claesson sentenció el grupo.

Suecia 3 (Forsberg 2′ y 59′, Claesson 94′)

Polonia 2 (Lewandowski 61′ y 84′ )

Suecia vs Polonia - Football tactics and formations

Janne Andersson se quedó a las puertas de repetir once por tercer encuentro consecutivo. Como se reclamaba, Robin Quaison fue titular en detrimento de Marcus Berg. En la escuadra polaca, Paulo Sousa volvió a darle la titularidad al capitán Krychowiak, tras cumplir sanción, en sustitución de Moder, autor del penalti a Gerard Moreno que pudo costarle la eliminación a un equipo que dependía de sí mismo pese a entrar con mal pie en el torneo. Sólo Suecia sabía que tenía el billete a octavos asegurado, el resto de factores quedaban por determinar.

Los escandinavos salieron sin especulaciones, querían ser primeros. Trenzando una jugada hasta la frontal donde Forsberg aprovechó un balón suelto para robarle el despeje a Jóźwiak con un toque sutil y cruzarla frente a Szczęsny. La Suecia más mandona en esta Eurocopa asedió a Polonia durante los primeros diez minutos. Lejos del repliegue habitual para esperar al rival, impedía que su rival traspasara campo propio. El conjunto de Paulo Sousa supo tomar aire para equilibrar el encuentro a través de la jugada más inverosímil. En un saque de esquina, Lewandowski cabeceó hasta en dos ocasiones hacia el travesaño. Si quieres hacerlo a posta, no te sale.

Crecía sobre la marcha Polonia en dirección a su jugador franquicia. Llevaba el mando pero se atascaba por la firmeza sueca sin balón. Demasiado envío frontal y cómodo para la retaguardia de Andersson. Imponente entre corrillos de atacantes y defensores en el área. Solo Zieliński se salió del guion, desde la frontal, para exigir el vuelo de Olsen. Por ocasiones, con la doble de Lewandowski al larguero y ésta, Polonia merecía el empate en comparación al bagaje de una Suecia en su línea: práctica, consistente y eficaz. Además, con el marcador a favor, encontraba su contexto preferido: atascar a un rival sin profundidad. Al descanso, las águilas blancas eran últimas de grupo. Sólo les valía el triunfo.

Robert Lewandowski volverá a ser la gran referencia de Polonia. Foto: Focus Images Ltd.
El doblete de Lewandowski dio esperanzas a una Polonia finalmente eliminada. Foto: Focus Images Ltd.

Puchacz dejó su lugar a un Frankowski con mayor vuelo por banda. Mientras Zieliński y Krychowiak trataban de desatascar desde la distancia. Era la única forma que tenía Polonia de inquietar a Olsen. Apenas conseguía producir desde el interior del área, pero el dominio ya era claramente polaco, que había disipado el espesor. Movió ficha Andersson apostando por Kulusevski en lugar de Quaison, que apenas mezcló con Isak. Había riesgo de transición. Porque un disparo de Polonia, provocó el contraataque sueco. Sacando tajada de los espacios en velocidad. Kulusevski acabó conectando con Forsberg para superar a Szczęsny desde la frontal del área y con el interior del pie derecho.

En ese contexto de ida y vuelta, el partido enloqueció. Y Lewandowski rompió la imbatibilidad sueca firmando un golazo para la esperanza de su selección. Escorado en el área, abrió el ángulo con rosca hacia la escuadra del palo largo de Olsen. Suecia volvía a encajar tras cuatro encuentros oficiales. Con más de media hora por delante, el encuentro no estaba decidido. A Świerczok, en fuera de juego, le anularon un gol a placer. Su entrada al campo mejoró la productividad ofensiva de Polonia. Krafth y Berg fueron los cambios de Andersson, creyendo que serían suficiente contra un rival a tumba abierta. Con Frankowski y Płacheta, a pierna cambiada, se masticaba el empate. Paulo Sousa había conseguido alterar, para bien, el rumbo de su selección en el partido. El extremo del Chicago Fire colgó un balón hacia el devorador del Bayern, con maniobra marca de la casa. España lo celebraba pero a Polonia todavía le hacía falta otro gol más porque seguía siendo última. Al contragolpe, sin embargo, Suecia explotó una vía con Kulusevski asistiendo a Claesson para sentenciar el liderato, liquidar el orgullo polaco y, de paso, dejar con la miel en los labios a España.

 

Foto de portada: Joep Joseph Leenen/Focus Images