Kingsley Coman, el Joker – MarcadorInt


El 23 de enero de 2022, Julian Nagelsmann sorprendió a muchos en el Olympiastadium: utilizó un dibujo todavía inédito esta temporada en el Bayern de Múnich. “Dado que Alphonso Davies está de baja desde principios de año por una leve inflamación del músculo cardíaco, Nagelsmann tiene que ser creativo en la banda izquierda, donde el canadiense se asentó con su velocidad y potencia ofensiva”, analizaba Kicker. “En Berlín, optó por primera vez por un sistema 3-2-4-1, en el que Kingsley Coman y Serge Gnabry ocupaban los carriles exteriores, pero no como ‘extremos’, sino, como explicó Nagelsmann al ser preguntado por Kicker, como ‘Joker’ o ‘laterales ofensivos’.” El resultado fue magnífico: 1-4, en una actuación de absoluto dominio con el 70% de la posesión, 30 disparos (19 a portería) contra 5 (2) del Hertha.

El último partido de Davies había sido el 4-0 contra el Wolfsburgo el 17 de diciembre de 2021 con el tradicional 4-2-3-1. En los siguientes encuentros —la derrota por 1-2 contra el Borussia Mönchengladbach y la victoria por 0-4 contra el Colonia—, Nagelsmann mantuvo el sistema que venía utilizando hasta entonces, pero, sin alternativa al lateral canadiense, improvisó a Marcel Sabitzer en el lateral izquierdo. Sus actuaciones fueron tímidas. Con la ausencia de Davies, el Bayern se quedó sin una de sus grandes armas y parecía no haber opciones en la plantilla que pudieran suplir tal pérdida.

Fue entonces cuando el joven entrenador decidió sacar de la chistera el sistema con tres centrales. Pero había un problema: el Bayern no tiene carrileros. Aparte de Bouna Sarr, que no se ha mostrado fiable al más alto nivel, Nagelsmann cuenta con jugadores de características defensivas que pueden atacar con cierta calidad como laterales, pero que carecen del repertorio que se le exige a un carrilero: Omar Richards, Josip Stanišić, Niklas Süle, Benjamin Pavard y Lucas Hernández. De ahí que el técnico haya optado por la audacia —un adjetivo que le viene como anillo al dedo a Nagelsmann— de ubicar a extremos como Gnabry y Coman como carrileros.

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XI del Bayern contra el Hertha Berlin.

Didier Deschamps tuvo un problema similar. Después de llegar a la final de la Eurocopa 2016 y al título mundial en 2018 con un inamovible 4-4-2 con Antoine Griezmann y Olivier Giroud en la delantera, el seleccionador francés sorprendió a muchos cuando utilizó un 3-5-2 en los octavos de final de la Eurocopa 2020 ante Suiza. Raphaël Varane, Clément Lenglet y Presnel Kimpembe eran los centrales. ¿Los carrileros? Pavard y Adrien Rabiot. Tragedia anunciada. “Su lista de 26 para la Eurocopa había sido diseñada para una defensa a cuatro. El cambio a una defensa a tres impuesta por las circunstancias (lesiones de Lucas Digne y Lucas Hernández) pone de manifiesto las grandes carencias en posiciones clave (sobre todo los carrileros)”, observó Cyril Morin en Eurosport.

Los sistemas con tres defensas y carrileros pueden ser muy ofensivos, pero la línea que separa un dibujo atrevido de uno inofensivo es delgada: la clave está en los carrileros. “Descubrí que el 3-4-3 también puede ser el mejor dibujo”, admitía Louis van Gaal en una entrevista en El País. “Debido a las cualidades de mi plantilla en la Copa del Mundo de 2014 ganamos 5-1 a España con un 3-4-3 que se transformaba en 5-3-2 en defensa. Este esquema también cubre muy bien el campo siempre que los carrileros sepan comportarse como laterales, interiores o extremos dependiendo de la situación del juego”, afirmaba el actual seleccionador de Países Bajos. “Así aprovechamos a Sneijder como diez liberándolo por delante y formamos una línea de cuatro plana en el mediocampo con De Jong y Wijnaldun en el medio, Blind y Janmaat por afuera. La ocupación de los espacios fue perfecta porque por una cuestión física es más fácil defender el mediocampo con cuatro que con tres. Haces mejor las basculaciones. Incluso para presionar la salida de los centrales contrarios: los apretábamos con los dos puntas mientras los extremos apretaban a los laterales. Pero cuidado: este 3-4-3 solo se desarrolla adecuadamente si tienes agallas. No muchos entrenadores las tienen.” “¿Por qué?”, le pregunta Diego Torres. “Porque necesitas que los laterales actúen como extremos. De lo contrario el 3-4-3 se queda en 5-3-2.”

Es lo que ocurre cuando tienes a Pavard y a Rabiot como carrileros. Y por eso Nagelsmann decidió utilizar a Gnabry y Coman allí. Pero Coman ya había jugado en esa posición; con Deschamps, unos meses antes. Después de la Eurocopa, el seleccionador francés convocó por primera vez a Théo Hernández, el carrilero ideal. Hacía falta alguien en la derecha. “La victoria en la Nations League ha cambiado los destinos. Jules Koundé y Théo Hernández se han ganado la titularidad”, escribió Morin. “Por el contrario, el naufragio de Benjamin Pavard en una posición que no es la suya obliga a Deschamps a replantear su once”. ¿Quién podría ser este jugador? Léo Dubois, nunca ha convencido, Djibril Sidibé ha bajado mucho, Ruben Aguilar y Valentin Rongier no tienen el nivel, Nordi Mukiele nunca parece haber entusiasmado al seleccionador.

¿Coman?

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XI de Francia contra Kazajistán

“Tan cómodo por la derecha como por la izquierda, su velocidad y su explosividad con el balón en los pies generan diferencias increíbles”, decía Le Parisien sobre él cuando aún era muy joven. Es un extremo extremadamente eléctrico y talentoso, tácticamente astuto, pero que no tiene —a pesar de haber marcado el gol del título en la final de la Liga de Campeones en 2020— tanta pólvora como sus homólogos en el club (Gnabry, Leroy Sané) o en la selección (Kylian Mbappé y Ousmane Dembélé).

Siempre ha gozado del afecto de Deschamps. Con 19 años, fue un jugador muy importante en la Eurocopa 2016. En 2018 se perdió el Mundial frenado por su estado físico, pero desde entonces ha sido convocado constantemente por el seleccionador. “La tentación es grande y se materializa contra Kazajistán (8-0) [13 de noviembre de 2021]. Es una carnicería para el adversario y una revolución para Les Bleus. Nunca las bandas de los tricolores han parecido tan amenazantes”, analizó Morin. Cierto, era Kazajistán. Pero el seleccionador parece estar decidido a mantener el 3-4-1-2. En la última fecha Fifa, para los partidos contra Costa de Marfil y Sudáfrica, convocó a Jonathan Clauss, carrilero derecho del RC Lens. Deschamps ha declarado que ve a Pavard como un central.

De repente, se han abierto las puertas para que Coman sea titular en el equipo campeón del mundo. Criticado durante mucho tiempo por ser ultraconservador, sobre todo teniendo en cuenta las espectaculares opciones de ataque de las que dispone, Didier Deschamps ha decidido cambiar. “Tengo la impresión de que ya no hay dudas sobre la táctica que adoptará Didier Deschamps con tres centrales y dos carrileros, que además serán jugadores ofensivos. Se trata de una pequeña revolución en la mentalidad del equipo francés”, dijo Daniel Riolo en RMC. “No elijo este sistema para encerrarnos atrás, sino para crear más peligro”, declaró Deschamps después del partido contra Costa de Marfil la semana pasada. “Costa de Marfil nos causó problemas en nuestra banda izquierda, pero no resolvió todos los problemas que les causamos. No quiero que nos reprimamos ante el peligro.”

“Lo que es cierto es que defensivamente no soy el más fuerte”, afirmó Coman. “Pero para un jugador de ataque, defiendo lo mejor que puedo. Si me piden que juegue en esta posición en el futuro, estaré muy contento”. Los ejemplos de extremos reconvertidos en carrileros o incluso en laterales abundan: Antonio Valencia, Jesús Corona, Jesús Navas, Jordi Alba, Davies, Ashley Young, Ivan Perišić, Emanuele Giacherinni y Victor Moses son algunos.

En el partido de ida de los octavos de final de Champions, el Bayern empató 1-1 en Austria contra el Red Bull Salzburgo, con un gol de Coman; de carrilero. En la vuelta, se esperaba un partido duro contra los austriacos. La aplastante victoria por 7-1 disipó cualquier duda. Robert Lewandowsi marcó tres goles y dio una asistencia. Pero Nageslmann, al final del encuentro, prefirió elogiar a otro jugador: “Una de las claves de hoy ha sido la interceptación defensiva de clase mundial de Kingsley Coman al principio del partido. Ha tenido una actuación increíblemente enérgica. Me quito el sombrero. ‘King’ nos ha abierto la puerta”.

Coman renovó recientemente su contrato con el club bávaro hasta 2027. Con las nuevas ideas de Deschamps, su participación en el Mundial no sólo parece asegurada, sino que parece que tendrá el protagonismo que suele requerirse en los sistemas con carrileros. Debería ser titular. Nagelsmann y Deschamps están contentos con él. Es su Joker.

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Foto de portada: MarcadorInt.