Sterling impulsa a una Inglaterra sólida pero sin brillo


La invicta e imbatida selección inglesa aseguró la primera plaza de su grupo con una otra victoria por la mínima gracias a su único goleador hasta el momento: Raheem Sterling. Con su segundo tanto, el extremo del Manchester City volvió a rubricar el mejor tramo de una consistente Inglaterra, aunque de más a menos frente a una República Checa carente de profundidad.

República Checa 0

Inglaterra 1 (Sterling 12′)

Republica Checa vs Inglaterra - Football tactics and formations

Tanto checos como ingleses encaraban la tercera cita con el billete a octavos de final bajo el brazo tras los resultados del lunes. Solo restaba por decidir el lugar a ocupar en la tabla. El empate daba la primera plaza a los de Silhavy, que repitió el once del empate frente a Croacia (1-1). Así que Inglaterra debía ganar para ser primera de grupo. Sin Mount, Chillwell ni Foden, y con el inédito Sancho aún en el banquillo; debutaron desde el inicio tanto Maguire -ya recuperado- como el esperado Grealish, que junto a Saka insuflaron frescura a su equipo.

Inglaterra empezó verticalizando con mucha intensidad. Con un envío largo de Shaw que Sterling prolongó por encima de la dubitativa salida de Vaclík. Sin embargo, por tercer inicio de partido consecutivo, el equipo británico volvió a encontrarse con la madera. Era el primer aviso. Porque aunque Sterling no brille por su puntería ni regularidad, poco después supo concretar. El extremo del Manchester City remató un caramelo del habilidoso Grealish, con quien permutaba constantemente en la mediapunta, convirtiendo su segunda diana en tres partidos para destacarse como el único goleador inglés en esta Eurocopa.

El combinado de los three lions había empezado con una marcha más y mayor contundencia, desubicando a la República Checa. Con Saka alertando a todo el entramado rival. Un regateador puro que, mediante sus individualidades, lideraba a su equipo hacia el último tercio. A la carrera, Kane fabricó su primer (y único) aviso. Condujo hacia el área, encaró para recortar ante Kalas para buscar el ángulo pero se encontró con la mano de Vaclík. Al atacante del Tottenham se le vio algo aunque continúa sin lucir a la altura de las expectativas.

Grant Hanley of Scotland and Patrik Schick of the Czech Republic during the UEFA Euro 2020 Group D match at Hampden Park, Glasgow Picture by Paul Chesterton/Focus Images Ltd +44 7904 640267 14/06/2021
Patrick Schick apenas entró en juego, protagonizando su encuentro más discreto en esta Eurocopa. Foto: Paul Chesterton/Focus Images Ltd

Con personalidad, República Checa mejoró sus prestaciones alrededor de la media hora de partido. A través de una réplica lejana de Holeš y poco después, con una ocasión casi inmejorable de Souček. Desde entonces, Inglaterra dejó de correr y, como consecuencia, dejó de funcionar. Tras el 0-1, se desgastaba basculando, cada vez más sometida por el conjunto checo, dueño del balón merced a la movilidad de sus piezas de tres cuartos de campo.

La selección inglesa necesitaba oxígeno. Estirarse en transición desde lo físico al no imponer su talento a través del balón. Y lo más complicado: encontrar el segundo para no sufrir. No tenía el partido controlado pese a su buena puesta en escena. Al igual que ante Croacia, solo ofreció buenos 25 minutos de juego en la primera mitad. El paso por los vestuarios provocó cambios. Henderson cogió el testigo de Rice y Ševčík entró por Jantko. Los pupilos de Šilhavý seguían teniendo buenas intenciones aunque estériles. Le faltaba profundidad porque la solidaridad de Inglaterra cerró espacios. Tanto Walker como Shaw contaban con la ayuda constante de sus extremos. Con el paso de los minutos, a la República Checa le bastaba con el 0-1. Estaba en octavos.

Los cambios de Southgate, que igualó como técnico los 57 partidos que disputó como futbolista con la selección, agudizaron el conservadurismo de su equipo. Rashford sigue sin fluir con Kane. En el 83′, Sancho debutó en esta Eurocopa. Y yendo de más a menos, una Inglaterra sólida pero poco brillante volvió a ganar. Dos goles que valen siete puntos para asegurar el primer puesto. Y lo más importante: dejando la portería a cero en los tres encuentros. Junto a Italia y Suecia, ésta a falta de un partido, es una de las tres selecciones que no ha encajado aún. Un equipo solidario, con pocas grietas, difícil de batir, y a través de ello intenta forjar su candidatura a expensas de ir creciendo en sensaciones para añadir más dinamita a su repertorio ofensivo.

 

Foto portada: Paul Chesterton/Focus Images Ltd.