Tres cuestiones que Alemania debe resolver para enfrentarse a Portugal

La derrota de la Selección Alemana por 1:0 ante Francia dejó varias incógnitas que Joachim Löw debe resolver de cara a su segundo encuentro en la fase de grupos de la Eurocopa contra Portugal. Cuestiones que no sólo se quedan en la mera alineación, sino que van incluso al esquema que ha de utilizarse. Alemania sabe que contra los portugueses no se puede fallar.

¿Jugar con tres centrales le funciona a Alemania?

La gran novedad táctica de la Selección Alemana en la última cita de Joachim Löw como seleccionador es la implantación de una línea defensiva con tres centrales y carrileros largos. Las principales ventajas de este esquema son una mayor amplitud y control, pero se necesitan centrales rápidos para poder replegar en caso de pérdida. En el encuentro contra Francia vimos a Kylian Mbappé hacer estragos en la defensa de Alemania en cuanto tenía metros por delante para correr. Ginter, Rüdiger y Hummels sufrieron mucho en los contraataques rivales, y este último realizó más de una intervención milagrosa para mantener al equipo con vida.

Ahora bien, Portugal tiene también a jugadores veloces en ataque y con mucha calidad para destrozar en transiciones, por lo que Löw debe sopesar si este esquema sigue siendo el mejor. Una defensa de 4 reduciría esos riesgos, la mayoría de los jugadores convocados están familiarizados con ella, y también permitiría colocar un jugador más en el mediocampo o en la punta de ataque. Eso sí, uno de los centrales tendría que ser sacrificado y se perdería parte de la proyección de Gosens y Kimmich en tareas ofensivas.

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¿Havertz y Gnabry son las mejores opciones ofensivas?

Las dos primeros sustituidos en el último partido de Alemania fueron Kay Havertz y Serge Gnabry. Ninguno de los dos tuvo su mejor noche frente a una Francia que se plantó muy bien atrás y concedió muy poco. Por un lado Gnabry cuando apareció lo hizo con muy poco atino. Por el otro, y teniendo en cuenta que Havertz es uno de los más talentosos técnicamente de la Mannschaft y que ante esas defensas debería ser quien pusiera la creatividad arriba, el jugador del Chelsea pasó casi sin pena ni gloria por el césped.

La cuestión es quién debe ser titular en la próxima cita. Viendo lo bien que les salió a los franceses ese plan, Portugal podría intentar lo mismo y Alemania tiene muchos nombres en la recámara para generar peligro. La titularidad de Müller no se cuestiona, y Timo Werner y Leroy Sané esperan su oportunidad en el XI inicial. Además, también están las opciones de Kevin Volland, para jugar con una referencia arriba, o de Jamal Musiala, quien se quedó fuera de la convocatoria en el primer partido. Las armas le sobran a Löw.

¿Deben repetir Kroos y Gündogan en la medular?

Por último, lo que también debe pensar Alemania es si la dupla de Toni Kroos e Ilkay Gündogan en el centro del campo sigue siendo indiscutible. Ambos sufrieron para poner en problemas a Pogba, Kanté y Rabiot, y al del Manchester City no se le vio nada cómodo, ya que en Inglaterra ha tenido una mayor libertad para acercarse al área. Kimmich como carrilero tuvo bastante influencia pero en muchas facetas del juego, obviamente, no pudo hacer nada al estar encasillado ahí.

Si el esquema sigue siendo el mismo o, si al cambiarlo sigue apostando el seleccionador por un doble pivote, hay que sopesar las opciones para que el combinado teutón tenga más fluidez. Florian Neuhaus no vio nada de acción contra Francia pero es una opción más que viable al igual que Leon Goretzka, a quien Alemania recupera para este próximo encuentro. Incluso Kimmich, a pesar de que se afirmara que su lugar en esta Eurocopa iba a ser el carril derecho, podría tenerse en cuenta. Apostar por alguno del tándem de FC Bayern München suele ser garantía de éxito.

Los problemas son varios e importantes, y el tiempo para hallar soluciones no es nada amplio. Portugal espera el próximo sábado y Alemania ha de jugárselo a un “todo o nada”. Otra derrota les dejaría con pie y medio fuera de esta Eurocopa.